En este caso, el uso de los acrónimos resulta muy bienvenido. Ello porque llamar “PV” a la Policitemia vera permite marcar una importante diferencia: una cosa es la conocida poliglobulia o “policitemia”, a secas, que frecuentemente obedece a harto conocidas causas relacionadas a condiciones ambientales, hábitos y hasta vicios. Otra es la PV que tiene una raíz mucho más profunda y compleja.