El brote global de viruela del mono o viruela símica es considerado una emergencia internacional por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general del organismo, “más de 30 países siguen reportando casos y preocupa la posible dificultad de rastreo y diagnóstico en muchas regiones, particularmente en aquellas donde se reportó con anterioridad transmisión de animales a humanos”.