Ramiro Galindo: Triunfo empresarial y compromiso social
Ramiro Galindo, un orgulloso cochabambino de nacimiento y empresario exitoso por elección, arraigado en Estados Unidos desde hace muchas décadas, relata su extraordinaria vida llena de logros, desafíos y un firme compromiso con la educación y el desarrollo colectivo. En su reciente visita a su tierra natal, Galindo, acompañado de su numerosa familia, compartió sus reflexiones sobre su trayectoria, los valores y sus planes futuros.
TRAYECTORIA DE ÉXITO
Desde muy joven, Galindo tenía una visión clara de su destino. “Migrar a Estados Unidos fue algo que tengo en la sangre desde niño”, afirma con pasión. Su visión de un futuro lleno de innovación y oportunidades lo llevó a emprender un viaje que marcaría el rumbo de su vida. A los 17 años, dejó su hogar en Cochabamba y se dirigió a Estados Unidos en busca de conocimiento y oportunidades.
Esa búsqueda lo llevó a estudiar en la Universidad de Texas A&M. Estuvo allí durante ocho años formándose continuamente. Sin embargo, su amor por Bolivia y el vínculo con sus padres lo trajeron de regreso durante una década.
Su compañía participó en la reconstrucción de la carretera Cochabamba - Santa Cruz y en la fundación de una planta industrial de aleaciones de estaño. Durante este tiempo, también representó al Gobierno danés como cónsul honorario y fue honrado como caballero por la Reina de Dinamarca. Ha sido también un pionero en la formación de la industria lechera en Bolivia, un hito que dio vida a PIL, una empresa que desempeña un papel fundamental en la producción de alimentos y el crecimiento económico del país.
Pero su espíritu emprendedor lo llevó nuevamente a Estados Unidos, donde fundó múltiples empresas en diversos sectores. Su influencia se expandió a través del sector bancario e inmobiliario y fundó una firma dedicada al desarrollo y operación de clubes de salud física. Su contribución al país norteamericano es innegable.
LEGADO DE GENEROSIDAD
Más allá de su éxito empresarial, Galindo es un firme defensor de la educación y el desarrollo. Durante su estadía en Cochabamba, a través de su fundación, entregó becas a destacados estudiantes de los colegios María Auxiliadora Cristo Rey, España y Paulo VI, y subrayó la importancia del ser humano como el recurso más valioso de una sociedad. “El recurso más importante que tiene el país no es el mineral o el producto agrícola o la madera, el recurso natural más rico de un país son las mentes de las personas y eso es lo que debemos refinar”, enfatiza Galindo.
Esta fundación ya otorgó 84 becas a lo largo de 18 años. Muchos de estos beneficiarios se convirtieron en profesionales destacados que aportan al crecimiento del país en diferentes rubros. Este compromiso con la educación y el desarrollo llevó a Galindo a idear planes con el objetivo de proporcionar medios de educación a jóvenes bolivianos en un futuro próximo.
LIDERAZGO Y DISCIPLINA
El estilo de liderazgo de Galindo fue fundamental para su éxito empresarial. “Vengo de una familia de ingenieros, entonces soy detallista y ordenado”, comenta. Su enfoque metódico y su compromiso con la excelencia han llevado al establecimiento de un grupo de 17 empresas en diferentes sectores, todas funcionando de manera independiente y contribuyendo al crecimiento de la sociedad.
Sin embargo, el impacto de Galindo va más allá de los negocios y la educación. A los 85 años, su vitalidad y compromiso con la salud son admirables. Su estilo de vida disciplinado, que incluye ejercicio regular y ayunos planificados, es un testimonio de su filosofía de mantener un equilibrio entre mente y cuerpo. Esta disciplina ha sido fundamental para su longevidad y vitalidad, permitiéndole correr más de 18 maratones y mantenerse activo a pesar de los años.
La vida de Ramiro Galindo es un testimonio inspirador de cómo la determinación, el deber con la educación, el desarrollo y la disciplina personal pueden llevar a un éxito excepcional. Su legado es un recordatorio poderoso de que el esfuerzo constante y el enfoque en la excelencia pueden transformar sueños en realidades palpables.
En el libro “The making of an American”, Galindo comparte sus valores y principios que guiaron su vida. Su mensaje es claro: la oportunidad abre la puerta al éxito, y el camino hacia ese éxito implica desafíos, disciplina y un firme compromiso con la superación personal y el bienestar colectivo.
En un mundo donde las historias de éxito son a menudo amplificadas, Galindo recuerda que detrás de cada logro hay una historia de esfuerzo, perseverancia y un corazón generoso dispuesto a hacer del mundo un lugar mejor. Su visión de que el recurso más valioso de un país son las mentes de sus ciudadanos resuena como un llamado a la acción para invertir en la educación y el desarrollo de las futuras generaciones.
DESAFÍOS
A pesar de sus numerosos logros, Galindo reconoce que su viaje no estuvo exento de desafíos. En 1985, enfrentó una crisis económica en Estados Unidos que puso en riesgo su estabilidad financiera. En medio de la crisis, Galindo tenía una deuda de más de ocho millones de dólares. A pesar de las dificultades, se mantuvo firme en su compromiso y la pagó con tenacidad y perseverancia. Esta experiencia de superar obstáculos difíciles moldeó su carácter y fortaleza, y le enseñó la importancia de enfrentar los desafíos con determinación.
Galindo también destaca la importancia de la retrospección y la sabiduría que viene con la edad. Reconoce que la juventud está llena de energía y ambición, pero falta la perspectiva que se adquiere con el tiempo. Su viaje personal lo ha llevado a comprender la importancia de la libertad, la autodeterminación y la iniciativa individual. Su creencia en la igualdad de oportunidades y su deseo de contribuir al bienestar colectivo reflejan su enfoque altruista y su compromiso con un mundo mejor.
FUTURO INSPIRADOR
En su visita a Bolivia, Galindo no solo compartió su historia y sus valores, sino que también ofreció consejos a los jóvenes emprendedores bolivianos que aspiran a seguir sus pasos. Les instó a leer y comprender su credo, que se centra en la libertad, la autodeterminación y la búsqueda de oportunidades.
Galindo sigue mirando hacia el futuro con entusiasmo y determinación. Aunque planea reducir su carga de trabajo, la educación sigue siendo una prioridad. La vida de este destacado empresario es un testimonio de que los sueños pueden lograrse con determinación, trabajo duro y un compromiso inquebrantable con los valores fundamentales.
Mientras reflexiona sobre su vida y logros, Galindo insiste en que su legado es el resultado de una serie de principios que lo han guiado a lo largo de los años. Su creencia en la oportunidad sobre la seguridad, la importancia de cumplir la palabra dada y la dedicación a la iniciativa personal son pilares que han sustentado su viaje.
CREDO
“Elijo ser un hombre libre.
Creo que la oportunidad engendra el éxito, por lo tanto busco oportunidad, no seguridad.
Prefiero el llamado del desafío a una existencia garantizada.
Quiero correr el riesgo calculado, soñar y construir, intentar y triunfar.
Si en el intento fracaso, busco la oportunidad de volver a intentarlo.
Es mi herencia confiar en mí mismo, ser un individuo en mis pensamientos, decisiones y acciones.
Quiero la libertad de elección para seleccionar mis opciones.
Encuentro satisfacción en la emoción del logro.
Me niego a canjear mi derecho a ejercer mi iniciativa por una promesa de seguridad proporcionada por el Estado.
Aborrezco los sistemas totalitarios.
Creo en un sistema social que me permita enfrentar nuevos retos, desarrollar oportunidades para mí y para los demás, y gozar justamente de los beneficios de mis creaciones.
Creo que la igualdad de oportunidades para todos es necesaria para preservar la paz y estabilidad.
Siento compasión y generosidad hacia los necesitados.
No encuentro sustituto para la libertad”.
El principio de Galindo, escrito en 1977, el cual considera la ruta de su vida.