postres dulces navideños fáciles de preparar
Hay postres clásicos e innovadores, los postres son un complemento ideal para las fiestas de fin de año. En Navidad se puede compartir con los niños e incluso empezar una nueva tradición familiar que se puede replicar cada año.
Estas ideas de postres fáciles y rápidos te saldrán perfectos.
Flan de dulce de leche
(para 6 personas)
Ingredientes: 200 g de dulce de leche, 1/2 l de leche entera, 4 huevos, 100 g de azúcar. Para caramelizar: 150 g de azúcar, 50 ml de agua.
Chantilly: 200 g de leche evaporada para montar, 50 g de azúcar. Frambuesas para decorar.
Preparación:
1. Chantilly: mezclar la leche condensada con el azúcar. Reservarlo en frío.
2. Caramelo: hervir el agua con el azúcar hasta que se haga caramelo. Verterlo en el interior del molde del flan y extenderlo por el fondo.
3. Flan: calentar la leche con el dulce de leche unos minutos hasta que se deshaga el segundo. Remover para evitar que se pegue. Cuando el dulce de leche esté bien disuelto, verter la leche, al hilo, sobre los huevos, removiendo bien. Dejar reposar y rellenar el molde. Cuajar al baño María en el horno a 170ºC durante una hora aproximadamente, hasta que al pinchar con una aguja salga limpia. Desmoldar en tibio, pasando un cuchillo por los bordes para despegarlo de las paredes.
4. Enfriarlo y servirlo con una cucharada de chantilly. Decorarlo con frambuesas.
Pasteles de Belén (para 12 unidades)
Ingredientes: 250 ml de leche entera, 1 limón, 1 palo de canela, 180 g de azúcar, 90 ml de agua, 30 g de harina de trigo, 4 yemas de huevo, 350 g de hojaldre de mantequilla (1 lámina y media de las cuadradas), 10 g de mantequilla (opcional)
Para servir (opcional): Azúcar glas y canela en polvo.
Preparación: Calentar 250 ml de leche entera a fuego medio junto con la piel de 1 limón, que se quita sin la parte blanca para que no amargue, y 1 palo de canela partido en dos, para que dé más sabor.
En cuanto la leche rompa a hervir, retirarla del fuego, tapar la olla y dejar reposar durante 10 minutos. Este tiempo de reposo permite que la leche infusione y adquiera ese aroma de limón y canela que tanto nos gusta.
Mientras tanto, mezclar 180 g de azúcar con 90 ml de agua en otra olla y hervir durante 3 minutos para crear un almíbar suave. Este será un componente esencial para que los pasteles tengan al final esa textura tan característica.
Una vez que la mezcla de leche ha reposado, retirar el limón y la canela de la leche y añadir 30 g de harina de trigo. Mezclar enérgicamente con unas varillas hasta que no haya grumos y calentar hasta que espese. Hay que remover con frecuencia para que no se agarre al fondo.
Luego, fuera del fuego, incorporar el almíbar en la mezcla de leche y harina poco a poco. Es importante hacerlo gradualmente para evitar grumos y lograr una consistencia suave y uniforme.
Separar las yemas de las claras. Añadir las yemas a la crema. Mezclar bien hasta obtener una crema de huevo suave y brillante.
En este punto, si lo desea pasar la crema por un colador fino en acero inoxidable para asegurarse de que no quede ningún grumo y que la textura sea completamente lisa.
Precalentar el horno a 250ºC, con calor arriba y abajo, pues tardará en tomar temperatura y se necesita que esté bien caliente. Luego, tomar 350 g de hojaldre de mantequilla. Enrollar sobre sí mismo y cortar en 12 trozos iguales.
Colocar en los huecos de la bandeja de muffins (o en cada molde individual de tartaletas), previamente engrasados con un poco de mantequilla si fuera necesario. Extender cada trozo de hojaldre con los pulgares desde el centro hacia afuera para forrar los huecos o moldes hasta que tengan 3 cm de altura.
En cuanto lo tenga listo, repartir la crema de huevo entre las bases de masa. Hay que llenar dejando medio centímetro hasta el borde para que luego no se salga el relleno durante la cocción.
Colocar la bandeja directamente al horno a media altura y dejar que los pasteles se horneen de 10 a 15 minutos a 250 ºC o hasta que estén dorados al gusto. Este corto tiempo de cocción permite que el hojaldre se dore y se vuelva crujiente, y que la crema de huevo se cuaje y se dore ligeramente en la superficie.
Por último, sacar los pasteles del horno y dejar templar durante 5 minutos en el molde, para luego transferir con cuidado a una rejilla y dejar enfriar correctamente.
Para terminar, los pasteles se pueden consumir tanto fríos como templados, espolvoreados con azúcar glas y un toque de canela, si se desea.
Corona de pavlova con pistacho y frambuesas (para 6 personas)
Ingredientes para 6 personas: 180 g de clara de huevo, 270 g de azúcar, 1 cdta. de almidón de maíz (maicena), 1 cdta. de vinagre blanco. Coulis de frambuesa: 250 g de frambuesas descongeladas, 200 g de crema batida, 50 g de azúcar.
Preparación:
1. Coulis: triturar las frambuesas y prensarlas en un colador sobre un bol para obtener su jugo. Merengue: montar las claras. Cuando empiecen a coger consistencia, incorporar el azúcar poco a poco. Seguir 10 minutos hasta que se disuelva. Agregar el vinagre y el almidón diluidos, y batir hasta obtener un merengue brillante y denso.
2. Dibujar en un papel de horno un círculo de 22 cm de diámetro. Darle la vuelta y, con una cuchara de helado, repartir el merengue en bolas alrededor del círculo. Con el dorso de una cuchara aplastar el centro y añadir una cuchara de coulis. Dibujar remolinos para mezclarlo. Hornear a 90ºC y cocerlo 100 min. Apagar el horno y dejarlo enfriar en él. Machacar los pistachos y mezclar la crema batida. Decorar.
Tarta a los 3 chocolates (para 6 personas)
Ingredientes: 1 paquete de galletas al gusto (integrales, de coco, de caramelo), 50 g de mantequilla, 1/2 l de crema batida. Primera capa: 4 hojas de gelatina, 1/4 l de leche, 70 g de azúcar, 150 g de chocolate negro. Segunda capa: 4 hojas de gelatina, 1/4 l de leche, 50 g azúcar, 150 g de chocolate con leche. Tercera capa: 4 hojas de gelatina, 1/4 l de leche, 25 g de azúcar, 150 g de chocolate blanco.
Preparación:
1. Triturar las galletas y mezclarlas con la mantequilla. Forrar el fondo de un molde con la capa de galletas presionando bien y reservar en el congelador. Montar la crema batida y reservar en nevera.
2. Capa de chocolate negro: en un bol con agua fría hidratar las 4 hojas de gelatina. Calentar la leche con el azúcar. Añadir la gelatina escurrida y el chocolate. Reservar hasta perder el calor. Mezclar con un tercio de la crema batida.
3. Volcarlo en el molde sobre la base de galleta y enfriar bien una hora. Repetir con el chocolate con leche y el blanco. Servir la siguiente capa cuando la anterior esté bien cuajada. Cuando esté todo, decorarlo con frutos rojos espolvoreados con azúcar glas.
Truco: es importante esperar bien a que cuaje cada capa antes de añadir la siguiente, para que queden las tres capas perfectamente diferenciadas. Verter el chorro de chocolate sobre el dorso de una cuchara para que no influya en la capa anterior.