Cochabamba Cuna de la Innovación Cervecera
La Llajta, tierra de la eterna primavera, resuena con el eco de tradiciones centenarias, sin embargo, en la última década, la ciudad ha experimentado un renacimiento cervecero, convirtiéndose en un bastión de la innovación en la producción de cerveza artesanal. Las diferentes cervecerías locales encabezan este movimiento, fusionando ingredientes, recetas y frutos tradicionales con la creatividad moderna.
La Asociación de Cerveceros Artesanales de Cochabamba (Acerart) con más de 10 años de trabajo en la ciudad lidera este proceso innovador. Esta organización cuenta con más de 25 socios activos. Lamentablemente, la pandemia del coronavirus y el contrabando de cerveza han afectado negativamente a la industria cervecera artesanal, que según estimaciones de la Cervecería Boliviana Nacional representa el 1% de la producción nacional y está por debajo del 14% de medianas empresas industriales y el aplastante 85% del mercado nacional por parte de la CBN en el año 2022.
A pesar de la predominancia de la cerveza industrial, los productores artesanales rompen esquemas y compiten en el mercado gracias al uso de ingredientes de temporada, ingredientes exóticos, la invención de nuevos estilos y sabores mediante la implementación de procesos tecnológicos de alta calidad, incluidos procesos norteamericanos y europeos que garantizan que el sistema estandarizado produzca una cerveza de calidad premium.
El presidente de ACERART y propietario de la cerveza Stier, Rodolfo Isaac Meyer, destaca la cantidad de productores que hacen uso de la creatividad e innovación para la elaboración de cerveza. “Somos muchas las cervecerías que innovamos con el uso de ingredientes locales, la cerveza Stier emplea miel, quinua, cáscara de naranja, café y frutas para su elaboración”, añade Meyer.
Cristian Rodríguez, ingeniero químico especializado en cerveza y propietario de la Cervecería Artesanal Grimm, comparte su entusiasmo por la innovación cervecera. Con una sonrisa, revela: “Este año sacamos 12 estilos de cerveza entre cervezas de temporada y especiales. Golden Ale, Irish Red Ale, Stout son estilos clásicos, pero también nos aventuramos en terrenos desconocidos con Vainilla Cream Stout, San Patricio Menta, San Patricio de Manzana y Pera”.
“Queremos otorgar al público estilos totalmente únicos, como por ejemplo una cerveza de oreo que salió para el aniversario de Cochabamba y que ahora nuestros clientes nos piden a menudo”, asegura.
La Cervecería Grimm no se limita a convenciones. Sus estilos especiales desafían los límites de la creatividad, desde la incorporación de galletas oreo en una cerveza hasta el uso de barricas de roble para madurar la Roble Brown Ale, que adquiere sabores amaderados con un grado alcohólico del 10%.
“Los estilos especiales rompieron esquemas al utilizar galletas oreo en una cerveza. La Roble Brown Ale es otro estilo madurado en barrica de roble que adquiere unos sabores amaderados con un grado alcohólico del 10%”, señala.
La aceptación local, según Cristian, fue clave para su éxito. “Fue muy buena; el público ya nos va conociendo y en cada evento siempre esperan cosas nuevas de Grimm”.
“En las diferentes ferias que Grimm participó, pueden degustar nuestros diferentes estilos. Es ahí donde recibimos felicitaciones de la gente que indicaron que nunca probaron una cerveza igual a las nuestras”, dice.
Mientras reflexiona sobre los desafíos, Cristian destaca la importancia de superar la resistencia inicial: “Es un desafío que la gente compre un producto que no conocen. Por lo mismo, tuvimos la oportunidad de recibir un reconocimiento de la Alcaldía como mejor cerveza de miel el año 2023”.
“Ser cervecero requiere de mucho estudio y dedicación. Sacar cerveza es fácil, pero sacar una buena cerveza es difícil, es como hacer comida; no cualquiera elabora un buen plato, pero cualquiera puede hacer comida”, afirma.
Con la mirada puesta en el futuro, Cristian revela los planes ambiciosos de Grimm: “Terminamos el año pasado con 12 estilos, este año pretendemos terminar con 18 estilos”.
“Este año, con la Asociación de Cerveceros Artesanales (ACERART), tendremos más actividades para crear cultura cervecera en el público”, asegura el propietario de la Cervecería Grimm.
Explorando la tradición
El ingeniero Williams Arandia, gerente de la cervecería WELRAY es una eminencia de la industria con 26 años de experiencia en la cervecería, uno de los pocos Maestros Cerveceros del país, diplomado en Gerencia de la Producción, juez sensorial certificado por ABINVEB. Especialista en tecnología cervecera y procesos cerveceros y ganador en Copa Mundial de cervezas con Paceña, es el artífice de la cerveza Kochala, una marca que comparte la pasión por la tradición y la innovación.
Al hablar sobre la variedad de estilos destaca la misión de Kochala: “Ofrecer nuevos productos en base a bebidas tradicionales de nuestra tierra, con insumos nativos como el maíz, café, miel y otros como el chile y la flor de jamaica”.
“La cerveza artesanal se caracteriza por ofrecer diversas variedades y estilos al consumidor que le gusta conocer y degustar de nuevos sabores y aromas”, afirma.
Kochala ha dado vida a la chicha k’ulli a través de su cerveza homónima, única en su clase. William comparte el proceso detrás de esta cerveza extraordinaria: “Para nuestros estilos tradicionales como la k’ulli, tuvimos que aprender a hacer chicha k’ulli con un maestro chichero y adaptar los procesos con nuestros procesos cerveceros”.
“La k’ulli es única por ser la primera en Bolivia con procesos tradicionales de la chicha k’ulli con la calidad en higiene y sanitización de una cerveza artesanal”, dice.
El compromiso de Kochala con ingredientes locales y procesos sostenibles es evidente en su amplia gama de estilos, desde la chicha k’ulli hasta cervezas de miel, jamaica, coco y café.
“Usamos maíz morado con procesos de malteo, insumos procesados, logrando sabores y aromas similares a la chicha k’ulli”, comparte.
William destaca los desafíos que enfrentan, desde la resistencia de las autoridades locales hasta la competencia desleal, pero encuentra satisfacción en los logros alcanzados.
“Participamos con la cerveza k’ulli en la copa Bolivia de cerveza que se realizó en Tarija con jueces internacionales de renombrado prestigio, donde se logró una sensación muy discutida de nuestro producto”, completa.
La Comunidad Cervecera
Ambos gerentes concuerdan en la importancia de la comunidad cervecera local y su crecimiento. Grimm destaca el papel de Acerart en ampliar el alcance de las cervecerías locales.
“Este año las cervecerías tuvieron mayor alcance al público, por los diferentes eventos que tuvimos. Creemos que ahora con Acerart tendremos más actividades para crear cultura cervecera en el público”, anticipa.
Williams de Kochala comparte una perspectiva similar: “Dentro de los objetivos de ACERART, están las actividades de degustación, asesoramiento, cursos especializados para lograr la mejora continua en cada cervecería miembro”.
“Hay ciertas condiciones a cumplir para entrar en este maravilloso mundo de la cerveza, de tener pasión por la cerveza, capacitarse lo mejor posible para lograr diversidad y calidad de cerveza y algo muy importante, paciencia y perseverancia para los primeros años donde hay una inversión completa”, especifica.
Cochabamba se erige como un faro de innovación cervecera, donde la tradición y la modernidad convergen para crear experiencias únicas en cada sorbo. Grimm y Kochala, con sus enfoques distintivos, han llevado la cerveza artesanal a nuevas alturas, desafiando las expectativas y dejando una huella duradera en la comunidad cervecera local. La cerveza en Cochabamba es más que una bebida; es un viaje de sabores, una conexión con la tierra y un testimonio de la pasión y dedicación de aquellos que la crean.
Celebraciones cerveceras especiales
San Patricio y Oktoberfest
La Asociación de Cerveceros Artesanales de Cochabamba celebra de manera especial el Día de San Patricio durante el mes de marzo. Este evento ofrece promociones en cerveza, música en vivo y una decoración que rinde homenaje a la festividad. El Día de San Patricio, con sus raíces en la cultura irlandesa, se ha globalizado, convirtiéndose en una tradición disfrutada en todo el mundo.
En Cochabamba, el color verde, emblemático de Irlanda y San Patricio, se refleja en la cerveza y es lograda mediante la adición de pera y manzana verde. Este toque distintivo no solo aporta un color característico sino también un aumento en el grado alcohólico, que alcanza aproximadamente el 10%.
El Oktoberfest, originario de Múnich, Alemania, es un festival anual de la cerveza que se celebra a finales de septiembre y principios de octubre. En Cochabamba, la Asociación de Cerveceros Artesanales (Acerart) recrea esta tradición alemana, reuniendo a todos los productores en un espacio lleno de música en vivo, concursos de disfraces inspirados en la época y región, así como juegos para entretener a los asistentes.
En cada edición de los diferentes festivales se fomenta el consumo responsable. Se realizan catas en pequeñas cantidades para educar el paladar de los asistentes, permitiéndoles disfrutar de las diversas cervezas sin la necesidad de ingerir grandes cantidades.
Estos eventos no solo resaltan la diversidad de cervezas artesanales en Cochabamba, sino que también promueven una experiencia responsable y educativa para los amantes de la cerveza. La fusión de tradiciones globales con la creatividad local enriquece aún más la escena cervecera en la ciudad.