Fue envuelta y arrastrada por una víbora gigante y sobrevivió para contarlo
Una vivencia aterradora hace que la existencia del gran viborón en el río Parapetí, no pareciese solo una leyenda, sino una realidad. Georgina Aramayo casi fue arrastrada hasta las profundidades en el río, pero logró sobrevivir y contar lo ocurrido, algo que le dejó traumas y mucho miedo.
El hecho ocurrió en el municipio de Camiri, en la comunidad Itanambikua, Santa Cruz. Georgina cuenta que se dirigió al río para lavar ropa junto a su hermana, sus sobrinos y sus hijos.
"Fuimos a traer agua del río, 'hay que bañarnos' me dijo mi hermana, estaba con sus hijos. Estaba hablando yo a mis sobrinos que ya no se acerquen. 'ten cuidado por ahí, si está hondo', les estaba diciendo, hasta que ya me estaba ahogando", relata al personal de la Alcaldía de Camiri.
La víctima relató se encontraba casi en la orilla, hasta que sintió un rose en la pierna, era la criatura. "Vi a la víbora, era negra y su cabeza era grande, estaba pendiendo auxilio y alcé mi brazo, mi hermana me estaba mirando y vinieron las señoras", cuenta.
Georgina dijo que la víbora era grande y gruesa. Tras ser envuelta por el animal empezó a ser arrastrada al fondo, pero luchó con todas sus fuerzas y pidió auxilio.
"Estoy con susto. No puedo dormir tranquila", relata entre lágrimas.
Una de las vecinas indica que Gergina se encontraba en el agua y se disponía a bañarse. De pronto, fue arrastrada y no podía respirar.
"'Se la está llevando el agua, dijimos, anda ayúdale' le dije yo. Mi hermana entró al agua y le sacó y le trajeron hasta la orilla", dice Edelmira Fernández, una comunaria que presenció el hecho.
"Yo veía que se lo estaba llevando el agua, se la llevó, su hermanita le fue a agarrar. Le abrazó a la chica su hermana, de ahí yo corrí y le jalé. Se giraba y nadaba", relata por su parte, Erlinda Fernández, una vecina.
Julio Flores, Mburuvicha Itananbikua, indica que muchos comunarios comentan que vieron al viborón. "Allá hay una cámara, quizá esa sea su cueva, pienso que esos están recorriendo, y están en busca de su presa", indicó.
Menciona además que hace cinco años desapareció un niño en el río, pese a que el pequeño era experto nadador. "Yo pienso que era eso, porque aquí la mayoría de los niños sabe nadar", añade.